Tabla de contenidos
Hacía mucho tiempo que teníamos ganas de hacer una ruta por Sri Lanka en 8 días o en más, teníamos Sri Lanka en el foco de nuestros viajes: su cultura, su historia, su gastronomía, sus paisajes, su naturaleza y su vida salvaje eran un cóctel perfecto para nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días. De hecho, ya estuvimos a punto de ir hacía justo un año atrás.
Barajamos muchas posibilidades para nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, muchas alternativas, pero hay tanto que ver y hacer que resulto algo complejo construir el viaje perfecto en el tiempo que teníamos. Aun así, en esta ruta por Sri Lanka en 8 días teníamos una cosa clara, queríamos playa o mar, cultura y ver animales en libertad. Sri Lanka es uno de los pocos países que ofrece de manera maravillosa la posibilidad de visitar hábitats únicos en el mundo y estábamos dispuestos de disfrutarlo en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Las carreteras no son demasiado buenas, pero son la manera más ágil de moverse por Sri Lanka, las distancias son cortas pero los tiempos para moverse de un punto a otro muy altos, por eso no dudamos en contratar (como la mayoría de los turistas) un servicio completo de chófer y conductor con la empresa Reddot Tours AQUÍ.
Durante toda nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, nos sorprendió gratamente la seguridad y la amabilidad de encontramos en toda la gente que nos acogía con una sonrisa en cada esquina.
| En cualquier caso, lo primero Y MÁS IMPORTANTE haciendo una ruta por Sri Lanka en 8 días, es que debes tener, es un buen seguro de viaje, nosotros siempre confiamos en Iati, además hacen un 5% de descuento por ser nuestro lector y si reservas a través de nuestra web AQUÍ. Si viajas sin seguro de viaje y tienes cualquier «imprevisto«, vas a tener que desembolsar mucho dinero. Es mejor viajar con tranquilidad tanto si tienes un problema logístico como médico. Nosotros nunca lo dudamos y siempre viajamos con un buen seguro de viajes. Usa el sentido común cuando no estás en tu país y estás lejos de casa. |
El mapa resumen de nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días es el siguiente :
Aunque tenemos artículos de esta ruta por Sri Lanka en 8 días detallados de cada lugar, a continuación te vamos a resumir nuestro diario de viaje en esta ruta por Sri Lanka en 8 días que bien puede ayudarte a planificar tu viaje. En cada día encontrarás un enlace al artículo general y otro enlace al Hotel en el que nos alojamos en cada momento. Por cierto que como resumen de hoteles puedes ver todos los hoteles de lujo de Sri Lanka en los que nos alojamos AQUÍ.
Día 1 : Pinnawala y nuestro primer contacto con Sri Lanka
El vuelo que nos trajo hasta Colombo y que procedía de Doha (Qatar) donde habíamos estado la noche anterior visitando la ciudad, llegaba con retraso debido a que el vuelo tuvo que esperar a pasajeros que venían en tránsito en Doha. Consumimos un día de viaje tanto por la visita a Qatar como por la pérdida de tiempo al viajar hacia el Oeste, pero nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días estaba bien calculada para ahorrar el máximo de tiempo.
El aeropuerto de Colombo (Bandaranaike International Airport) no es grande y los trámites de inmigración a la llegada son realmente ágiles, en realidad no estuvimos más de 5 minutos para el control de pasaporte y entregar la tarjeta de inmigración que nos dieron en el avión antes de aterrizar .
Entiendo que con nuestro número de pasaporte ya sabía que íbamos a llegar puesto que nos habíamos registrado antes como es formal y obligatorio para tener un visado en la web oficial de inmigración del gobierno de Sri Lanka, tienes que hacerlo antes de tu viaje en su web AQUÍ.
Nada más llegar, sacamos dinero de un cajero. Y esta vez no vamos a hacer la conversión de si es mejor sacar de un cajero o hacer cambio de divisa como hemos hecho en otros países como Japón que puedes verlo AQUÍ o Perú que también puedes verlo AQUÍ. Esta vez usamos una tarjeta (ojo que esto no es publicidad ni nos han pagado por esto, sólo nos ha ido bien) de Transferwise, que puedes recargar con dinero y luego con la aplicación del móvil o por la web seleccionar las monedas que quieres utilizar, los cambios los hacen según el mercado y tienen una comisión mínima, algo como 1€ por cada 300€ … lo cuál está muy bien porque nosotros sacamos dinero de los cajeros de Sri Lanka y pagamos sin comisiones.
Nada más llegar nos esperaba un agente de Reddot Tours con quienes habíamos confiado la ejecución de nuestro viaje, que había sido planeado por nosotros y ellos habían puesto los medios para que todo fuese más ágil y seguro durante esta ruta por Sri Lanka en 8 días: conductor (Athula), reserva de los hoteles, entradas, visitas, etc. Por ejemplo así ahorrábamos mucho tiempo en llegar a Minneriya y buscar una empresa de jeeps para visitar el parque nacional y además un slot para visitarlo, de ésta manera íbamos a tiro hecho.
En el paquete de bienvenida de Reddot tours teníamos un detalle de todo, así como una tarjeta SIM con internet aunque la mini-van que teníamos tenía wi-fi así que estábamos online bastante tiempo. Cargamos maletas, nos presentamos y nuestro conductor Athula comenzó nuestro viaje y ruta por Sri Lanka en 8 días.
Pasamos por un pueblo repleto de tiendas de cacahuetes incluso por la carretera, algo curioso en Sri Lanka donde hay muchos puestos ambulantes en las carreteras pero depende del área en el que te encuentres, mucho tienen cacahuetes, otros sólo cestas de paja, otros dátiles … es curioso y entretenido a la vez.
Fuimos directos a Elephant Orphanage en Pinnawala, lugar que queríamos saltarnos en cualquier caso durante nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días por todo lo leído en redes sociales, pero pagar la entrada de ese lugar era la única manera de llegar al río donde hay elefantes sueltos y donde queríamos comer en el Hotel Elephant Park que tiene unas vistas maravillosas del. El precio es de 2500 LKR y aquí es donde tengo que decir que aunque leímos auténticas brutalidades sobre lo que sucede con los elefantes en Pinnawala, todo lo que vimos fue que algunos iban con cadenas, ninguno desnutrido o maltratado, … también pensamos que dado el tamaño de éstos animales, no se les puede poner una cuerda como a los perros o a los caballos es decir, en cierta manera entendemos que se deben usar objetos que garanticen la seguridad. En cualquier caso estaban libres excepto los enfermos que estaban en una zona donde les atienden y tenían mucho espacio para estar libremente.
Hay mucha controversia con esto, en teoría los elefantes de aquí son recogidos cuando han sido maltratados o se les ha encontrado en malas condiciones fuera de un parque nacional o han recibido algún tipo de abuso e incluso disparo por parte de la caza furtiva … lo que ya no sé es si debido al turismo, luego éstos elefantes son devueltos a los parques nacionales como Minneriya para que vuelvan a estar en libertad.
La comida del hotel Elephant ciertamente bien, además los precios bastante buenos: arroz o noodles muy grandes por 800 LKR (3.8€), 600 (2.9€) la cerveza de 1 litro, el alcohol tiene impuestos muy altos en Sri Lanka.
Desde Pinnawala y prosiguiendo nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, marchamos hacia Kegalle, donde por un angosto camino entre selva y montaña arriba llegamos a nuestro primer hotel, el Rosyth Estate House, situado sin ningún lugar a dudas en un lugar idílico rodeado de vegetación, plantaciones de té, monos y muchas casitas de lugareños que habitan en la ladera de la montaña.
El complejo en el que se encuentra el Hotel Rosyth Estate es realmente idílico, en lo alto de una montaña y con unas vistas maravillosas de la jungla incluso desde la piscina. La acogida por todos los miembros del hotel fue realmente maravillosa, cuidando cada detalle para que nos sintiéramos como en casa, cosa que de verdad consiguieron. Lo primero que nos ofrecieron fue un placentero masaje de pies en los jardines junto a la piscina.
Decidimos pasar un rato en la piscina relajados tomando un café con el único sonido de la naturaleza y haciendo algunas fotos antes de salir a dar una caminata por la jungla con un local. Aprendimos mucho sobre árboles, plantas y la cultura local. Para la cena nos prepararon un maravilloso lugar privado en el jardín rodeados de antorchas de fuego. Probamos la comida tradicional incluyendo el «street food» de Sri Lanka, es el famoso «Kottu» que puedes encontrar en todas las ciudades y en la mayoría de los pueblos de Sri Lanka cuando cae la noche. El cocinero prepara todos los ingredientes y a golpe de mano con un par de palas corta todo mientras lo cocina en una plancha.
PUEDES RESERVAR EL MISMO HOTEL QUE NOSOTROS (ROSYTH ESTATE) AQUÍ.
La magia de Sri Lanka hizo que al apagar las luces de la habitación, algunas luciérnagas con una luz intermitente se apoyase en el cristal de la ventana para darnos las buenas noches en nuestro primer día de viaje de esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Día 2 : Buda de Avukana y Sigiriya
Amanecimos con una calima sobre la jungla, la vista desde nuestra habitación en lo alto era realmente fascinante. Desayunamos –entre otras cosas– una típica comida de Sri Lanka, algo llamado «hopper«.
Athula, nuestro conductor nos esperaba fuera para iniciar nuestro segundo día en esta ruta por Sri Lanka en 8 días hacia el denominado Triángulo Cultural de Sri Lanka, hoy teníamos planificada la visita al buda de Aukana y la icónica roca de Sigiriya .
Tras casi dos horas de viaje ya que aquí en Sri Lanka la distancia en kilómetros no es equivalente al tiempo (no quiero imaginarme para los viajeros que se aventuran a usar autobuses y transporte urbano), llegamos a Aukana donde nos permitieron entrar sin taparnos como es normal en este tipo de templos, ciertamente los monjes eran muy abiertos de mente y muy simpáticos.
El monje que nos atendió era muy agradable y tenía amigos en Madrid, de hecho nos acompañó un rato mientras hacíamos fotos en la estatua del Buda de Avukana, una monumental escultura de más de 12 metros y tallada en una sola pieza en el siglo V d.C.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE EL BUDA DE AUKANA AQUÍ.
Tras la visita marchamos hacia Sigiriya, no sin antes hacer una parada en un típico restaurante de turistas, pero la verdad, era un buffet de comida de Sri Lanka que estaba bastante bien y que costaba 1000 LKR (4,9€), la cerveza de 1 litro eran 650 LKR (3,2€).
Desde ahí seguimos hacia Sigiriya donde nuestro conductor Athula nos dejó en la entrada más cercana y que es para locales. La entrada cuesta 30$ (USD) por persona, algo que directamente compró el conductor ya que llevábamos todo organizado con Reddot Tours. Nos acompañó hasta la entrada para explicarnos mucho sobre el lugar y se marchó a esperarnos al otro aparcamiento al que regresaríamos después, el de los extranjeros y de manera que sería más cómodo para nosotros, ciertamente Athula nos facilitó mucho el viaje y la logística en todo momento durante nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
No puedo decir que fuésemos rápido durante la visita pero sí hicimos muchas paradas por las fotos, aun así desde que entramos hasta que salimos nos llevó dos horas y media tranquilamente.
Desde la base de la antigua ciudad de Sigiriya donde hay unas vistas espectaculares de la roca, cruzando por las imposibles rocas del borde de la montaña y desde ahí pasadizos y escaleras arriba donde se pasa por una pared repleta de pinturas antiguas de Buda y sobre la vida cotidiana de la vida en Sri Lanka hace siglos, donde además un par de monos nos intentaron robar metiendo la mano en el bolso de Bea. Pero vamos, tengo que decir que los monos en Sri Lanka no son agresivos como los que encuentras en otros lugares de Asia como Malasia (en las Cuevas de Batu son extremadamente agresivos), Tailandia, Camboya … aquí son bastante pacíficos.
Una vez llegas a las garras del león de Sigiriya tras haber subido ya la mitad de la montaña, hay una zona de descanso desde la cual queda la peor y más empinada parte hasta la cima, con un camino artificial y angosto que da verdaderamente vértigo.
Realmente en la cima tan sólo hay ruinas del antiguo palacio del Rey, ya poco se conserva del palacio más que varios muros, la piscina y muchos monos. Eso sí, la vista desde aquí hacia la infinita jungla es magnífica, aunque la mejor vista de Sigiriya como tal y su perfil es desde la roca de Pirudangala, pero debido al tiempo que lleva subir, la logística y que en diciembre anochece a las seis de la tarde, decidimos suprimir la visita. Pero contentos con el día de hoy en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE SIGIRIYA AQUÍ .
Con la noche cayendo y cuando nos comenzaban a atacar los mosquitos, así que no perdimos mucho más tiempo y salimos hacia el Hotel Amaya Lake en el que pasaríamos dos días como centro de operaciones para hacer visitas por el Triángulo Cultural de Sri Lanka.
Una vez en el Hotel nos recibieron y nos dieron la habitación (que son casas independientes) número 48 justo en frente del lago y cerca de la piscina. Terminaba así un maravilloso días en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES RESERVAR EL MISMO HOTEL QUE NOSOTROS (AMAYA LAKE) AQUÍ.
Día 3: Polonnaruwa y elefantes en Minneriya
Tras un paseo matutino por el Hotel Amaya Lake y el borde del lago donde hay algunas casitas en los árboles, así como tras desayunar junto a la piscina, nuestro conductor nos recogió a las 8am para poner rumbo a las ruinas de la antigua ciudad de Polonnaruwa siguiendo nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
La ciudad está situada junto a uno de los cuatro «tanques» del país, lo que en realidad parecen lagos, sobre todo por la vegetación y fauna que hay en ellos son en realidad lagos artificiales construidos hace unos 300 años, sin duda una ingeniería adelantada a su tiempo.
El precio de la entrada a Polonnaruwa es de 25$ (USD), comenzando la visita en el museo donde hay auténticas joyas rescatadas de la ciudad. Tras el museo, la visita es a través de varias áreas que se pueden hacer caminado (una locura y si tienes dos días para visitar las ruinas), en bici (esto es más extenso que Ayutthaya en Tailandia, tengo en cuenta), en tuk tuk que bien te llevan o alquilas para llevarlo tú, o como nosotros con tu conductor y de manera más ágil y eficiente. Aunque la idea de las bicicletas nos gusta mucho tal y como hicimos en Ayutthaya (Tailandia) y en Cobá (México), en éste sitio por distancias y humedad yo personalmente no lo recomiendo.
En Polonnaruwa se exploran restos de templos y palacios únicos repletos de historia y que además son patrimonio de la humanidad. Al ser un lugar muy turístico te encuentras a los típicos vendedores ambulantes que te persiguen para que les compres algún souvenir.
PUEDES VER NUESTRO ARTICULO COMPLETO SOBRE POLONNARUWA AQUÍ.
Tras la visita teníamos planificada una de nuestras visita más deseadas en esta ruta por Sri Lanka en 8 días, ésta vez, por el parque nacional de Minneriya donde se encuentra una de las reservas de Elefantes en libertad más grandes del mundo, pero el conductor nos dijo que los elefantes que viven allí en total libertad se mueven y que en esta época del año estaban en el parque nacional de Eco. Hay tres Parques Nacionales juntos, uno es Minneriya, otro Eco y Kaudulla, es importante que sepas donde están el mayor número de elefantes en cada momento para ir al sitio correcto y no perder la oportunidad de ver a los Elefantes.
Paramos en una de las empresas acreditadas que tienen Jeeps y licencia para entrar en el Parque Nacional, fuimos a tiro hecho, así que entramos en busca de estos gigantones. Al principio tan sólo vimos ágilas y otros aves rapaces pero no nos desesperamos, ya que el entorno era maravilloso. Finalmente y como media hora después de entrar al Parque Nacional apareció una manada de elefantes con sus bebés, un grupo que pudimos observar desde muy cerca y siempre subidos en el Jeep.
Tras disfrutar de esta primera manada proseguimos la marcha y vimos algún elefante disperso, posiblemente machos ya que en esta época del año estás solos y sin grupo, llegamos a un mirador en el que sí podíamos bajar del jeep y donde disfrutamos de una magnífica vista de la jungla con elefantes durante el atardecer. Habíamos conseguido uno de nuestros sueños en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Continuando hacia la salida vimos una elefanta y nos paramos a observarla, cuando estábamos dispuestos a hacer la foto, apareció su bebé entre la maleza y la madre (como protección) hizo un atronador ruido y vino corriendo hacia el Jeep para golpearnos, por suerte el conductor estuvo ágil y aceleró antes de que nos golpeasen todas las toneladas de su peso, pero de verdad que la elefanta corría muy rápido tras nosotros. Por suerte una vez vio que nos alejamos, ésta se paró y volvió con su bebé y ya pudimos seguir tranquilos. Sí, lo sé, en realidad somos nosotros invadiendo su espacio, tenía todo el derecho de proteger a su bebé y su territorio.
La propina al conductor del Jeep fueron 10€, según nos dijeron, era la propina habitual.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE LOS ELEFANTES DE MINNERIYA AQUÍ.
En resumen, la experiencia de los elefantes fue realmente maravillosa, y el día en sí fue de lo más completo. Otro gran día de esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Desde aquí fuimos directamente a nuestra casita frente al lago del Hotel Amaya Lake.
Día 4: Cuevas de Dambulla y Kandy
A primera hora y tras hacer unas fotos en el Hotel Amaya Lake, fuimos rumbo al templo de Dambulla, uno de los lugares patrimonio de la Unesco con los que cuenta Sri Lanka, y no es para menos. Este iba a ser otro gran día en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
El acceso al templo –que cuesta 1500LKR (7,3€)– consta de dos partes, una son las 5 cuevas repletas de budas de todo tipo y colores, techos pintados con budas, incienso … monos; realmente fascinante, sobre todo la cueva número 2. Un total de 157 budas repartidos por las cavidades de la montaña hacen que el interior de éstas milenarias cuevas repletas de historia sobre Sri Lanka sean una de las joyas ocultas de todo Asia.
Puedes comenzar visitando ésta parte de cuevas primero o bien puedes ir primero al Templo Dorado y subir a las cuevas, nuestra logística para evitar pegarnos una paliza montaña arriba y abajo y luego volver con el sofocante calor, fue que el conductor nos dejó en el aparcamiento de la zona de las cuevas de Dambulla donde subimos por las escaleras y visitamos las cuevas con él como guía y luego caminamos por un sendero repleto de monos montaña abajo hacia el templo Dorando, donde nos esperaba nuestro conductor en el otro aparcamiento y así ahorraríamos mucho tiempo en regresar y sobre todo evitar un agotamiento innecesario.
Así que, tras visitar ésta primera parte de las cuevas de Dambulla en lo alto de la montaña bajamos jugueteando con multitud de familias de monos (un momento mágico en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días)hasta llegar al gran Buda Dorado de Dambulla, cuya entrada es una inmensa boca dorada y en cuyo lateral hay una fila de decenas de estatuas de monjes esperando para entrar a su interior, sin lugar a dudas una de las imágenes más famosas de Sri Lanka.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE LAS CUEVAS DE DAMBULLA AQUÍ.
Tras la visita, pasar por el aseo (que hay que pagar y donde huele como en el infierno) y tomar un pequeño snack en los puestecillos que hay junto al aparcamiento, seguimos el camino rumbo a Kandy, no sin antes parar a comer en un restaurante en medio de la selva donde había un buffet de comida tradicional de Sri Lanka (bastante bueno por cierto) cuyo precio era de 500LKR (2,45€ ) cada uno, desde luego bastante y muy bien de precio para ser un lugar repleto de turistas.
Tras comer, Athula nos llevó rumbo a Kandy donde nos esperaba nuestro guía de la empresa Pepper Sri Lanka (se llamaba Rohana Dharmarathne), quién nos iba a enseñar durante tres horas el templo del diente de buda y la ciudad de Kandy desde el punto de vista de un local. Era nuestra segunda parte del día en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Al complejo del «Temple of Tooth» no me dejaron entrar en primera instancia puesto que llevaba un drone en la mochila, así que tuvimos que dejarlo en un restaurante cercano y luego recogerlo. Ciertamente me pareció una medida muy tonta, ya que un drone podría entrar perfectamente volando desde fuera.
El interior del Templo del Diente de Buda en Kandy no tiene gran cosa pero sí la parte central repleta de oro puro y una urna que contiene a su vez varias urnas (como una matriusca) hasta llegar al diente de Buda, algo que no puedes ver excepto a horarios específicos cada día, nosotros no coincidimos y además queríamos evitar la multitud que se agolpa varias veces al día para verlo.
Tras visitar el Templo del diente de Buda y tomar algo en el restaurante al que había confiado mi drone, marchamos a caminar por los bulliciosos mercados y calles de Kandy descubriendo sus rincones. Incluso encontramos aún pegatinas del concurso Pekín Express España, en cuya última edición estuvieron por Sri Lanka. Caminando puedes visitar los puntos más turísticos de la ciudad como el Queens hotel Kandy, la calle principal de Kandy, Colombo street, Elephant stables y el Mercado de Kandy entre otros lugares.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO DE KANDY AQUÍ.
Mientras estábamos con nuestro guía Rohana Dharmarathne por Sri Lanka, nuestro conductor de Reddot Tours aprovechó para recoger los tickets del tren a Ella. Nos comentó que incluso para ellos como agencia de viajes oficial, es difícil obtener tickets de primera clase, y hay que reservar al menos un mes antes y luego ir a recoger a Kandy, no se pueden comprar directamente en la estación aunque sí puede haber reventas para turistas a un precio muy elevado. Por lo visto hay una especia de mafia turística con algunas agencias con los tickets del tren a Ella, tenlo muy en cuenta si haces esta misma ruta por Sri Lanka en 8 días.
La verdad que nuestra visita por Kandy con el guía local fue bastante buena, con él tuvimos acceso a todo, incluso a probar alimentos locales en las tienda de manera gratuita, gracias también a que la gente local es muy amable y además se nota que valoran mucho el turismo. Desde aquí ya nos llevó Athula hasta el Hotel Theva Residency, uno de los mejores hoteles de Kandy donde nos dieron su mejor habitación, la número 2 con unas vistas magníficas y un jacuzzi para relajarnos con vistas a la ciudad desde lo alto de la montaña, el mejor final para otro maravilloso día en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES RESERVAR EL MISMO HOTEL QUE NOSOTROS (THEVA RESIDENCY) AQUÍ.
Día 5: Plantaciones de té de Nuwara Eliya y tren a Ella desde Nanu Oya
Me desperté bien pronto, sobre las 4:30am y ya me costó coger el sueño nuevamente. Así que bajamos a desayunar pronto y hacer algunas fotos y vídeos con un delicioso desayuno junto a la piscina infinita del Hotel Theva Residency antes de poner rumbo a Nanu Oya para tomar el tren a Ella. Uno de nuestros sueños en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Durante nuestra planificación del viaje estudiamos muchas posibilidades, entre ellas el visitar una fábrica de té e incluso pasar un día por Nuwara Eliya, el área más famosa de Sri Lanka sobre las plantaciones y manufacturación de té. Pero finalmente decidimos no hacerlo porque entre otras razones, si se trata de paisajes, es algo que podíamos hacer con nuestro conductor, al fin y al cabo son plantaciones de té, no es ni siquiera una planta bonita. Además visitar una fábrica de té implica esa típica «turistada» de el proceso del té, recolección, y luego te intentan vender lo invendible … es más !Ni siquiera nos gusta el té! …
Dicho esto, nuestro plan fue super efectivo, hacernos 3 horas en coche desde Kandy hasta la estación de Nanu Oya y así ver las cascadas y montañas repletas de té con alguna parada y también hacer un trayecto del tren a Ella de 3 horas, en vez de pasar horas muertas en el tren.
Entonces, de camino a Nanu Oya tuvimos la oportunidad de paramos en varias plantaciones de té, en una de éstas paradas un señor se acercó a hacernos unos trucos muy buenos de magia, e incluso se metió una espada por la boca, muchos ya lo visteis en mis Stories de Instagram, y si no, podéis ir a IGTV donde está subido nuestro viaje y ruta por Sri Lanka en 8 días en cortas «Stories«.
También tuvimos la oportunidad de visitar las cataratas «Ramboda Waterfall«, localizadas en un paisaje idílico. La mejor vista se obtiene a través de un hotel y tomando un ascensor, como nuestro conductor conocía a las personas de recepción del hotel entramos sin problema.
Tras hacer unas fotos y vídeos con el drone seguimos hasta Nanu Oya atravesando más y más campos de plantaciones de té.
Al llegar a la estación, el conductor nos dio los pasajes que había conseguido para primera clase. Allí mismo también puedes comprar boletos (si quedan) de tercera clase, con la desventaja de que no hay asiento asignado y la gente se agolpa en las ventanas y puertas así que si lo que buscas es estar relajado y tener espacio y sobre todo hacerte la famosa foto en la puerta, creo que deberías apostar por conseguir con antelación un pasaje en primera clase.
Nuestra logística fue que el conductor de Reddot Tours nos dejase en la estación y con nuestro equipaje, para que nosotros fuésemos más ligeros y tranquilos. Nos esperaría en Ella con nuestro equipaje.
PARA TENER TODA LA INFORMACIÓN SOBRE EL TREN DE ELLA PUEDES LEER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO AQUÍ.
La estación estaba llena de turistas así como gente local y vendedores ambulantes. Los carteles donde indicaban los andenes, horarios y próximos trenes eran maderas pintadas que un señor iba cambiando manualmente, fue como un viaje al pasado. Desde el andén pude ver además que había un dedo de separación entre las juntas de los raíles.
Nuestro conductor nos acompañó en todo momento e incluso nos hizo fotos desde fuera cuando estábamos sentados, fotos que luego nos envió al final del viaje, la verdad que Athula fue el perfecto chófer, guía, seguridad y compañero de viaje.
El trayecto de tres horas que hicimos en el tren de Ella desde Nanu Oya se nos hicieron muy cortos, pasamos muy poco tiempo en nuestro asiento, estábamos sentado en la puerta abierta del tren, haciendo todos mientras el aire nos daba en la cara y disfrutando de la gente. Fueron unas horas maravillosas en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
La primera clase del tren de Ella no es lujoso ni mucho menos, con nosotros viajaban turistas y locales que comían arroz de un cubo enorme, cantaban y tocaban música mientras el tren seguía su camino entre túneles, montañas, y unas vistas maravillosas de pueblecitos, campos de té, jungla, puentes y estaciones repletas de gente en las que paraba el tren.
Una vez llegamos a Ella, Athula no estaba esperando. Estuvimos planificando que hacer en Ella, porque nosotros teníamos en mente visitar el puente de los nueve arcos (Nine Arch Bridge), pero por lo visto requería de un tuk tuk y unos 40 minutos de ida y 40 de vuelta más el tiempo que dedicásemos allí. Todo eso haría que llegásemos muy tarde a Yala donde teníamos uno de los mejores hoteles de Asia y que queríamos disfrutar al máximo.
Finalmente pasamos un poco tiempo por la calle principal de Ella, una ciudad que nos gustó mucho en cuanto a que había de todo para pasar un buen tiempo: muchos turistas de todo tipo, restaurantes, hoteles, locales de ambiente y fiesta, masajes … si habéis estado en Bangkok, imaginaros la famosa calle de los mochileros «Khao San Road» pero a lo grande.
En el aparcamiento donde Athula dejó el coche mientras dábamos un paseo por Ella, Athula nos regaló unas tazas de Sri Lanka con fotos nuestras, ahora entendimos por qué nos hacía fotos. Además invirtió tiempo que no estaba con nosotros para ir a un sitio a que hiciesen las tazas, ¡qué grande es Athula!.
Tras dar una vuelta, fuimos a las afueras de Ella, a unos 5 minutos básicamente a visitar las cataratas Rawana waterfall, una inmensa cascada con varias caídas desde lo alto de la montaña donde nos hicimos unas fotos maravillosas con unos monjes de Malasia que estaban visitando Sri Lanka. Una de mis fotos favoritas de nuestro ruta por Sri Lanka en 8 días.
Había gente que «regalaba» piedras de colores, pero que luego básicamente te pedían una voluntad y de negarte, ya te pedía dinero para pagarlas, no nos pasó a nosotros pero sí lo vimos en muchos turistas.
Desde Ella y siguiendo nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, salimos rumbo a Yala, eran unas tres horas de viaje, y fuimos a tiro hecho. Excepto una parada técnica ya que Athula necesitaba descansar y comer algo, momento que aprovechamos para dar una vuelta, y fue cuando descubrimos los «Food City«, que son los supermercados más famosos de Sri Lanka donde encuentras de todo y al mejor precio, compramos unas galletas y varios productos locales.
Llegamos ya por la noche pero antes de la hora de cenar. El Hotel Chena Huts de Uga Escapes está situado en el interior del Parque Nacional de Yala, así que un trayecto se hacía por caminos de tierra repletos de agujeros.
La llegada al hotel fue maravillosa, una palapa acogía la recepción del hotel donde como un ritual, tuvimos que poner la bandera de nuestro país (España) en un sitio junto a las banderas del resto de los huéspedes. Tras ponerla toda la gente en recepción y muchos empleados más que vinieron para la ceremonia comenzaron a aplaudir y a darnos la bienvenida. Fue un super momento en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
Tras asentarnos en la maravillosa habitación, fuimos a cenar y donde no pudimos tener una mejor bienvenida ni un mejor final para un día como el de hoy. Estábamos cenando en el hotel bajo la luz de las velas y con el sonido del mar de fondo y de repente un camarero alertó de que había un elefante, nos giramos y con las linternas estaban alumbrando a un enorme elefante que estaba caminando por la playa. Si bien es peligroso y por eso varios empleados del hotel aparecieron por la seguridad de todo por si se acercaba más, fue sin duda un momento maravilloso. El elefante simplemente miró y siguió su camino perdiéndose por la oscuridad. Sri Lanka es el único país del mundo en el que elefantes en libertad se acercan a las playas, y además sucede aquí, en Yala.
Terminamos la noche en la piscina privada de nuestra habitación tomando unas bebidas mientras nos dábamos un baño bajo las estrellas. Un día sencillamente, irrepetible. Uno de los mejores momentos de nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE CHENA HUTS BY UGA ESCAPES AQUÍ.
Día 6: Parque Nacional de Yala y Chena Huts
Justo antes del amanecer, sobre las 5:30am estábamos listos para ir a primera hora al Parque Nacional de Yala. Aunque se puede entrar a cualquier hora, los momentos en los que más posibilidades hay de ver animales son a primera hora y a última hora, ya que en las horas centrales y con el calor, los animales suelen estar escondidos protegiéndose del sol. Comenzaba otro maravilloso día en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
El Hotel Chena Huts no sólo tiene todo incluido en bebidas y comida (por cierto, bebidas de lujo, puedes pedirte tantas botellas de buen vino como quieras) sino que también incluyen actividades como varias salidas al día al Parque Nacional de Yala. Además tienen coches propios con salidas desde el propio hotel, es decir, no tienes que ir fue a un pueblo cercano a una empresa o perder el día anterior para contratar algo, tengo en cuenta para tu propia ruta por Sri Lanka en 8 días.
Para acceder al Parque Nacional de Yala debes ir siempre con empresas autorizadas y en coches altos que tengan garantías de seguridad. En nuestro caso llevábamos posiblemente el mejor coche de todos los que vimos y además nos llevaron un buenísimo desayuno que pudimos comer (sin bajar del jeep) junto a un precioso río lleno de ciervos.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE EL PARQUE NACIONAL DE YALA AQUÍ.
Tuvimos fortuna de ver un Leopardo, aunque estaba durmiendo en lo alto de una roca, y posteriormente se marchó, pero fue el hecho de que por primera vez veía un Leopardo en libertad y sin duda con eso, ya había merecido la pena venir hasta Yala. Posteriormente vimos multitud de animales como elefantes, pavos reales, todo tipo de coloridas aves, cocodrilos, búfalos, jabalies y monos.
Nuestra visita por el interior del Parque Nacional de Yala duró unas tres horas y regresamos al hotel sobre las 10am, así que tuvimos tiempo de desayunar en el hotel, así como disfrutar de un paseo por la playa y sobretodo de estar relajados en la piscina de nuestra maravillosa villa hasta las 3:30pm que habíamos hablado con nuestro conductor de Reddot Tours para que viniese a recogernos.
PUEDES RESERVAR EL MISMO HOTEL QUE NOSOTROS, EL CHENA HUTS DE YALA AQUÍ.
Nos dio mucha pena dejar el hotel ya que era un lugar maravilloso en medio de la naturaleza. Tanto, que para salir debías pedir permiso y un «ranger» (guarda) te acompañaba por seguridad, para evitar ser atacado por algún animal.
Siguiendo nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, pusimos rumbo a nuestro siguiente destino, ésta vez íbamos al paraíso de Sri Lanka, a las playas más famosas y bonitas del país, poníamos rumbo a Unawatuna. No sin antes aprovechar la luz del día para hacer algunas paradas.
De camino a Unawatuna desde Yala paramos en la enorme estupa (pagoda) blanca de Tissamaharama Raja Maha Vihara donde nos hicieron una ofrenda y donde pudimos disfrutar de la gente local en un domingo, ya que junto al templo había un canal repleto de puestos ambulantes de comida (incluso había gente ofreciendo bebidas gratis) y gente bañándose en el canal, disfrutando de una vida alegre. Realmente la escena transmitía alegría.
Poco más adelante visitamos la pagoda de Yatala Wehera, otra enorme estupa budista rodeada de agua y nenúfares. En realidad hicimos muchas paradas en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, es una ventaja tener conductor.
Desde aquí ya fue todo conducir hasta el Hotel Mosvol Villa situado justo en frente de la playa de Unawatuna donde nos tomamos unas bebidas y cenamos en la habitación algo que comida que habíamos comprado en un supermercado, ciertamente el cansancio se notaba, estábamos viajando muy rápido de un lado a otro (aunque por suerte no conducíamos nosotros).
Y aquí acabó, bajo las estrellas y en Océano Índico, otro inolvidable día en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
Día 7: Ballenas desde Mirissa y excursión a la Sri Lanka Rural
Sin tregua a descanso es nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días y desde que llegamos al país, y a pesar de estar justo en frente de las mejores playas del país, madrugamos y nos levantamos aún de noche para ir a Mirissa a ver ballenas. Era otro de nuestros puntos clave en lo que a naturaleza se refiere en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
Athula nos esperó fuera y nos llevó hasta el puerto de Mirissa, allí tomamos un café y nos embarcamos con el amanecer y con unas vistas maravillosas de Mirissa, sus playas, su puerto y sus pescadores. Al salir del puerto nos dieron de desayunar en el barco, con unas vistas extraordinarias.
Al principio tan sólo vimos alguna tortuga gigante pero poco más, seguimos la marcha hasta que una llamada por radio a nuestro barco alertó al capitán y tomamos rumbo hacia un lugar en el que había habido un avistamiento.
Entonces entendí cómo funcionan las empresas turísticas para avistamiento de ballenas. Hay varias empresas que venden estas excursiones, no puedo decir de que los servicios sean mejores o peores pero sí que los barcos son todos más o menos iguales. Cada empresa sale de puerto a la misma hora y cada una hace una ruta diferente, así entre todas cubran una gran amplitud. Una vez una encuentra ballenas, se comunican y de repente, se convierte en una especie de persecución entre todos los barcos.
Vimos a una ballena Bryde de unos 15 metros de longitud junto a una ballena bebé, fue sorprendente como en las inmersiones largas de repente aparecían en un lado totalmente contrario. Pudiera ser que se estuviesen algo estresadas por los barcos, pero también es verdad que tan sólo fueron como 30 minutos extra, las vimos y disfrutamos de cerca, hicimos fotos y volvimos al puerto.
Desde el puerto de Mirissa, Athula nos llevó al hotel no sin antes hacer alguna parada en playas en las que había varios pescadores sobre palos que bien responden a una de las imágenes más significativas de Sri Lanka. Éstos pescadores se llaman «Stilt Fishermen», y la verdad que tienen un arte extraordinario. En nuestra primera parada nos dijeron que nos cobraban 1000 LKR por persona por hacer fotos, algo a lo que nos negamos. Desde el hotel con el zoom les hice fotos y además con el drone también. Además Athula fue más tarde e hizo fotos que luego nos envió.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE UNAWATUNA Y QUÉ HACER ALLÍ AQUÍ.
Una vez en el hotel Mosvold Villa tuvimos tiempo de relajarnos en la piscina con vistas al mar, pasear por la playa y hacer snorkel en el maravilloso arrecife que se encuentra justo en frente del mar. Comimos en nuestra hamaca con las mejores vistas posibles, justo en frente del océano índico. Yo me pedí un pad thai que estaba riquísimo, puedo decir que es de los mejores que he comido jamás, ni en Tailandia ni en ningún restaurante tailandés, éste estaba que te mueres.
He de decir que, y la época en la que el sol era menos intenso pero de verdad que era igualmente fuerte, el poco tiempo que estuvimos aquí en la playa y al sol nos quemamos, hay que tomar de verdad, muchas precauciones en Sri Lanka con el sol, por su situación geográfica el sol da bastante fuerte.
Tas desconectar un poco y relajarnos en la playa, Athula nos llevó a una nueva aventura de la que no estábamos a priori muy convencidos a realizar en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días, pero que finalmente nos encantó. Se trata de una excursión de la empresa Pepper Sri Lanka que puedes encontrar AQUÍ.
Nos llevó a un lugar donde entre casas encontramos a un señor con una barca. A través de un río repleto de vegetación y de lagartos enormes que iban nadando por el río llegamos a un lugar donde entre vegetación salimos y visitamos una pequeña fábrica artesanal de fibra de coco, era un lugar donde nos explicaron como quitaban los pelos de coco y crear una resistente fibra usado para muchas cosas. Tras eso un tuk tuk nos llevó hasta un pueblecito donde en la casa de un lugareño había unas bicicletas, el dueño de la casa nos acompañó durante unos 6 kilómetros por una camino rural repleto de monos y de pequeñas casitas de gente rural, así como niños que por algunos momentos nos acompañaban en sus bicicletas. Otro momento mágico en nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
Aprovechamos para hacer un par de paradas y regalar material escolar que llevábamos a varios niños que había por allí, super contentos y la verdad que fue muy gratificante. Al final de la ruta en una casa que pertenecía una comunidad rural de la zona nos invitaron a unos cocos y a comer unos «hoppers» junto a más comida tradicional de Sri Lanka. Regresamos en bicicleta y desde allí Athula nos llevó de vuelta al hotel.
La excursión anterior fue realmente fascinante, fue un conjunto de todo en uno y sobretodo nos encantó tener la posibilidad de estar con la gente local y rural y formar parte de sus vida aunque fuese por un tiempo. Tenla en cuenta para tu propia ruta por Sri Lanka en 8 días o en más.
Ya en el Hotel Mosvold Villa de Unawatuna, estuvimos sentados en una mesa en frente del mar, a la luz de las velas comando unas bebidas relajadamente. Fue otro día muy completo y donde aprendimos mucho dentro de nuestra ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES RESERVAR EL MISMO HOTEL QUE NOSOTROS (MOSVOLD VILLA) AQUÍ.
Día 8: Galle y Colombo
Comenzaba nuestro último y no menos espectacular día en Sri Lanka, los buenos días nos lo dio un mono saltando de palmera en palmera, el cuál vimos nada más abrir la puerta de la habitación, la cuál da a una pequeña terraza y con vistas al océano Índico tras unas palmeras.
En el desayuno junto al mar, el mono nos observaba desde la distancia y se iba acercando poco a poco hasta que un momento se puso junto a nosotros, evaluó la situación, saltó y se llevó algo de comida, ¡qué bonito!.
Tras nuestro relajado desayuno en el Hotel Mosvold Villa, hicimos el check out y Athula nos llevó hasta la fortaleza de Galle donde nos esperaba un Guía Local de la empresa Pepper Sri Lanka (puedes contratar ésta visita guiada en su web AQUÍ).
Recorrimos no sólo la parte visual de la fortaleza sino también lugares ocultos a los que no podrías acceder de no ser porque vas con un guía local que además conoce a todo el mundo, así pudimos visitar la parte más antigua de la fortaleza que no está abierta al público, una parte aún negra por los cañones portugueses de hace siglos.
El guía local conocía absolutamente todo y a todos, contándonos historias de cada rincón, y lugares en los que se crió desde pequeño.
Tras casi tres horas llegamos hasta el famoso faro de Galle donde nos despedimos de nuestro guía y donde Athula nos esperaba para recogernos para seguir esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE QUÉ VER EN GALLE AQUÍ.
Desde Galle fuimos directamente a Colombo donde lo primero que hicimos fue ir a comer a un famoso restaurante asiático Moonson Colombo. Era nuestra última parada en esta ruta por Sri Lanka en 8 días.
En realidad no hace falta más de un día para conocer Colombo, puede incluso visitarse en medio día si te mueves con tu conductor o en taxi o tuk-tuk. No es una ciudad en la que tengas que dar largas caminatas para ver cosas o en la que acabes exhausto ya que tienes que ir sí o sí en algún transporte. Eso sí, Colombo es una versión reducida de las ciudades de la India y algo totalmente diferente a lo has podido estar viendo por Sri Lanka. Colombo es una ciudad loca, llega de gente, trafico, ruidos por todas partes, gente que grita, calor y humedad y todos los ingredientes para que sientas un poco de agobio.
Athula nos llevó a los lugares más emblemáticos de Colombo y ahorramos de verdad mucho tiempo, además ejerció de guía en la mayoría de los lugares a los que nos llevó. Tan sólo necesitamos unas 3 horas para visitar los lugares emblemáticos de Colombo.
PUEDES VER NUESTRO ARTÍCULO COMPLETO SOBRE QUÉ VER EN COLOMBO AQUÍ.
Desde aquí, Athula nos llevó directamente al aeropuerto, donde todo había comenzado en esta ruta por Sri Lanka en 8 días, y fue allí donde le dimos la propina y donde nos despedimos del que fue el mejor conductor, guía, guarda de seguridad y gran compañero de viaje.
El aeropuerto de Colombo fue donde pasamos los últimos momentos de nuestro viaje y ruta por Sri Lanka en 8 días. Curiosamente no nos hicieron sacar de las bolsas ningún equipo electrónico como portátiles, además no había que dejar los teléfono o relojes en ninguna bandeja sino que pasabas con ellos por el arco y además de todo, no pedían los pasajes … vamos, ¡viva la seguridad!.
Ciertamente Sri Lanka superó todas nuestras expectativas, cada momento y cada día que pasaba nos gustaba más, en seguida nos enamoramos completamente del país: su amabilidad, su gente, su cultura, su naturaleza, sus playas … absolutamente todo. Un país donde la gente siempre hace todo lo posible para que estés bien y te lleves lo mejor de ésta país. Esta ruta por Sri Lanka en 8 días sin lugar a dudas se nos ha quedado corta, este es un país al que seguro volveremos.
